viernes, 14 de marzo de 2014

LA CERVEZA EN ESPAÑA

Se dice que la cerveza fue introducida en España, un país tradicionalmente vinícola, por Carlos V en el siglo XVI. 
 
Carlos V


 Tras su abdicación, el emperador instaló una pequeña fábrica de esta bebida en el monasterio de Yuste, al que le había acompañado un maestro cervecero.
 
MONJE DE YUSTE


A partir de entonces, el consumo de cerveza en nuestro país evoluciona lenta y positivamente y en torno a 1900 aparecen las grandes compañías cerveceras españolas: Mahou (1890), Aguila (1900), Cruz del Campo (1904) y Damm (1910).
Su baja graduación alcohólica y sus propiedades refrescantes contribuyeron a que, a partir de la década de los sesenta, la cerveza se situase entre las bebidas más consumidas en España.



El bebedor español de cerveza, cada día es más selectivo en la elección de marcas y estilos, consume una media de 64,75 litros de esta bebida al año, siete menos que hace seis. No obstante, no todos los datos son desalentadores. Mientras redujo la importación de cerveza extranjera, España exportó a todo el mundo 357.613 hectolitros de producción nacional. Cabe subrayar el auge que ha experimentado la cerveza sin alcohol entre nuestros consumidores, hasta alcanzar un porcentaje que supone el 10% del consumo nacional.



TIPOS DE CERVEZA

 Las cervezas varían mucho de sabor, color y fuerza. En cada fase del proceso de elaboración es susceptible de alteraciones, modificaciones e intervenciones creativas. Con todo, hay una distinción básica en la familia de las cervezas: el tipo de levadura. Las cervezas elaboradas con levaduras flotantes, es decir, aquellas que flotan en la superficie del mosto en fermentación, reciben el nombre de tipo ale; las cervezas que se elaboran con levaduras que fermentan en el fondo de la cuba reciben el nombre de tipo lager. Las cervezas de tipo ale fermentan más rápido a temperaturas entre los 15 y los 25 °C, mientras que las tipo lager fermentan más lentamente entre los 5 y los 9 °C. Las cervezas tipo ale pueden servirse a los pocos días de finalizar la fermentación; las tipo lager, por el contrario, deben almacenarse a 0 °C durante periodos que oscilan entre tres semanas y tres meses, deben su nombre a este proceso: Lager significa "almacén" en alemán, y Lagerbeer significaba originalmente cerveza para almacenar. Es costumbre servir las cervezas tipo ale más calientes que las tipo lager. La cerveza tipo ale precedió en muchos siglos a la lager. A pesar de ello, el sabor suave de la última la ha convertido en el tipo de cerveza que predomina.



Existe un gran número de tipos de cerveza a lo largo y ancho de nuestro planeta, unas 5.000. Cada país tiene un sabor característico que nos permite con un poco de práctica, localizarlas geográficamente. Por ejemplo, las cervezas mexicanas son cervezas suaves, las belgas suelen ser dulzonas y en un gran número de casos, son de alta graduación. También son fácilmente reconocibles las alemanas, británicas, españolas etc... Aunque realmente, existen sabores muy dispares dentro de una misma zona geográfica.
Las cervezas se catalogan principalmente a partir se su sabor, aunque también se suelen catalogar a partir de su color, fermentación, ciudad de origen, ingredientes, etc... Muchas cervezas reciben el nombre de las ciudades que las vieron nacer, como es el ejemplo de las Pilsen de la República Checa, las Munchener de Alemania, las Burton ales de Staffordshire (Inglaterra) etc...
La mayoría de las cervezas tienen como componente principal la cebada, aunque las podemos encontrar de malta o trigo o mezcladas con distintas frutas silvestres. 


La fermentación también es importante, dependiendo si durante la fermentación la levadura queda en la superficie o en el fondo se puede dividir en cervezas tipo ale o tipo lager, respectivamente. Las tipo ale fermentan más rápido y a mayor temperatura. Las lager, servidas más frías y deben permanecer de uno a tres meses almacenadas antes de poder consumirse.
La cerveza es una bebida que admite la mezcla. Pese a que casi todo el mundo bebe cerveza sola, se puede mezclar, el limón le acompaña bastante bien.
Entre las variedades clásicas de cerveza, los expertos distinguen diversos tipos en razón del lugar de origen, la elaboración y los ingredientes añadidos.